Podcast 8 Nutrición, Belleza y Salud – Clasificación de los alimentos
Clasificación de los alimentos y sus funciones
Para la mayoría de nosotros comer es un placer. También están aquellos que comen solamente por necesidad, pero en fin: ellos se lo pierden.
Este acto -que tan solo haciendo tres comidas diarias- repetimos casi 100.000 veces a lo largo de nuestra vida, tiene una función: mantenernos con vida.
Envejecemos y morimos porque la regeneración de las células es mas lenta que el deterioro que nos causa el medioambiente. No porque estemos programados para ello, como los electrodomésticos y todos los productos electrónicos: este modelo de televisión tiene una vida de 5 años. Y a los 5 años se muere y a comprar un nuevo modelo.
Por desgracia somos un modelo único. Y de momento, la única manera conocida para alargar la vida en buenas condiciones es a través de la alimentación. De esos nutrientes que ponen en marcha la regeneración de tejidos, que regulan las reacciones metabólicas y que nos dan energía.
A medida que lo vamos consiguiendo, a medida que la alimentación es más completa, variada y equilibrada, vamos alargando el tiempo y disfrutamos mientras tanto una mejor calidad de vida.
Según la revista española de investigaciones sociológicas, la esperanza de vida ha aumentado en más de 40 años entre 1910 y 2009, o sea en el período de 1 siglo. Estoy convencido que generaciones posteriores -no se cuantas-, conseguirán revertir el deterioro celular alargando la vida hasta puntos que hoy no podemos soñar e incluso, hasta alcanzar la inmortalidad.
Claro que entonces se originaran otros problemas como el espacio y los recursos. En fin…siempre existe algún problema…
Cuando se habla que «hay que comer de todo», en realidad, la idea es que hay que comer de los tres grupos de alimentos.
Porque comer de todo a veces se convierte en un mensaje erróneo. Quizás comamos de todo pero desequilibrado, y seguramente ese desequilibrio esté a favor del grupo energético, o sea, los hidratos.
Para evitarlo debemos conocer la clasificación de los alimentos según su función y los distintos orígenes. Es decir, las fuentes que nos aportarán ese tipo de nutrientes.
Según su función, podemos clasificar los alimentos en:
- plásticos o constructivos
- energéticos que son una fuente de combustible
- reguladores.
Alimentos plásticos o constructivos
Este grupo integra a aquellos alimentos cuyos nutrientes intervienen en la formación de nuevos tejidos que estructuran el organismo.
En esta labor constructiva del cuerpo, los principales nutrientes utilizados son proteínas y minerales. Las proteínas se proporcionan principalmente a través de leche y productos lácteos, carne, pescado, aves, nueces, soja y legumbres, etc.
Alimentos energéticos
Este grupo suministra de manera constante energía para llevar a cabo los procesos involuntarios como la respiración, la circulación de la sangre, etc., que son esenciales para la continuidad de la vida. Además, se requiere una cantidad de energía para convertir los alimentos ingeridos en nutrientes útiles. El calor liberado durante este proceso ayuda a mantener el cuerpo caliente. Eso es lo que se conoce como metabolismo basal que necesita entre un 50-60 de la energía disponible.
También se requiere energía para llevar a cabo actividades voluntarias, como actividades profesionales, domésticas y recreativas. La energía se proporciona principalmente a nuestro cuerpo a través de carbohidratos y grasas en la comida.
En este grupo se encuentran:
- Aceite y grasas.
- Frutos secos.
- Cereales (arroz, harinas, pasta, pan).
- Azúcar, miel, chocolates y dulces.
Alimentos reguladores
Este grupo de alimentos tiene por función la de regular las actividades del cuerpo. Incluye la regulación de actividades tan variadas como :
- el latido del corazón
- el mantenimiento de la temperatura corporal
- la contracción muscular
- el control del equilibrio hídrico
- la coagulación de la sangre
- la eliminación de productos de desecho del cuerpo, etc.
Además de regular nuestros procesos corporales, los alimentos también nos protegen de diversas infecciones, enfermedades y lesiones. Por ejemplo, el consumo de vitamina A y alimentos ricos en vitamina C ayuda a construir la resistencia en el cuerpo para luchar contra el organismo invasor.
Los principales nutrientes que realizan estas funciones incluyen proteínas, vitaminas, minerales, agua y fibra. Aunque el cuerpo necesita estos nutrientes en cantidades muy pequeñas, es muy importante que estén presentes en nuestras dietas diarias. Las principales fuentes de estos nutrientes protectores y reguladores son vegetales de hoja verde, leche, frutas y verduras frescas,hongos, legumbres, frutos secos etc.
¿Y que porcentaje de alimentos energéticos es el adecuado?
Ya hemos visto que las sustancias reguladoras son las orgánicas que están presentes en los alimentos que aunque indispensables para la salud, no tienen propiedades calóricas. Hablamos de vitaminas y minerales.
Según la pirámide alimenticia tradicional, el perfil calórico para una dieta adecuada se obtiene de
- 55-60% de hidratos de carbono
- 12-15% de proteínas
- 25-30% de grasas
Pues aquí viene «la madre del cordero». como diría aquel: este es el punto de NO acuerdo entre nutricionistas, médicos, físicos, químicos, investigadores. Por supuesto, también de consumidores y dietistas.
A modo particular, me inclino por la pirámide creada por el Dr. Mércola.
- 50-75 % grasas saludables: aguacate, huevos, aceite de oliva, de coco, Ghee
- 25% de proteínas de alta calidad: carne de res orgánica,pollo, huevos, salmón, pescado azul pequeño como bocarte o sardina.
- Hidratos de carbono provenientes de vegetales, sin limitación
En la web os dejo la imagen y el enlace para que tengáis una idea más clara. Observareis una pirámide en cuya cúspide está la base de la nutricional. En cambio, la base está formada por grasas saludables, vegetales y hortalizas frescas.

